Los cultivos de Florette Foodservice se digitalizan
- 21 junio 2019
Con la colaboración de empresas referentes Florette Foodservice moderniza sus técnicas para lograr una mayor sostenibilidad en el cultivo de sus vegetales
Invierte más de 1 millón de euros en la instalación de sensores de monitorización y la puesta en marcha de un semillero en Murcia
Madrid, 21 de junio de 2019. Florette Foodservice lleva varios años trabajando en la digitalización de sus cultivos. Si hace dos años implantaba un innovador sistema de gestión integral de la mano de Hispatec -empresa de software líder en el sector agrícola- mediante el cual gran parte de la producción se podía controlar a través de una aplicación móvil, en 2019 ha comenzado un proyecto más ambicioso para lograr una mayor sostenibilidad en el cultivo de sus vegetales.
Mediante la colaboración con otras empresas expertas en cada área, este proyecto consiste en monitorizar el campo, es decir, implantar nuevas tecnologías que permitan una mayor rapidez por parte de los trabajadores a la hora de consultar el estado de los cultivos de un modo inteligente. En otras palabras, “aplicar la innovación tecnológica al servicio de los que más saben, nuestros agricultores, permitiendo hacer un seguimiento exhaustivo del desarrollo de cada vegetal, respetando su ritmo de crecimiento natural y practicando a la vez el ahorro y la optimización de recursos naturales”, explica Javier Les, agricultor de Florette Foodservice.
Un ejemplo de ello es la monitorización de plagas o de riegos. Esta última consiste en instalar sondas que miden el nivel de humedad del terreno y ayudan a determinar el riego necesario en cada momento. Se trata de un proyecto que comenzó hace 5 años en colaboración con la startup Bioagro, y que ha permitido el desarrollo e implantación de esta tecnología en todas las zonas de producción de Florette Foodservice. A esto además se suma la colaboración con Agrisat, empresa navarra especialista en teledetección, que hace un seguimiento exhaustivo de las fincas mediante imágenes por satélite para así conocer la uniformidad de los cultivos y si necesitan más o menos agua.
Por otro lado, para el control de plagas Florette Foodservice ha desarrollado e incorporado en sus cultivos un sistema para la monitorización automática de los diferentes insectos en el campo. Gracias a un sistema autónomo alimentado por un panel solar, varias cámaras toman fotografías en alta resolución de una placa adherente a insectos y, seguidamente, las imágenes se envían a través de GPRS a una plataforma web donde son analizadas. Los resultados pueden visualizarse desde la web o a través de dispositivos móviles y se trata de un control a tiempo real donde los datos recogidos pueden ser utilizados para posteriores análisis más exhaustivos.
Además, de la mano de Hispatec, Florette Foodservice ha invertido 400.000€ en la implantación de sensores que, de forma automática, transmiten el estado del suelo: consumo de agua real de riego, consumo de fertilizantes naturales, etc., para así ahorrar y aprovechar adecuadamente los recursos.
“Gracias a todas estas innovaciones podemos controlar mejor los cultivos, conocer en qué fase de crecimiento están, cuál es el momento óptimo para su recolección, etc.”, comenta Les.
Todas estas novedades tecnológicas ya se están aplicando en todas las zonas de cultivo de Florette Foodservice además de en las nuevas que ha puesto en marcha este año. Por un lado, los 55.000m2 de cultivos protegidos de Gran Canaria, que se unen a los 90.000 m2 de invernaderos ya instalados en Tenerife hace 5 años, lo que ha permitido desarrollar una nueva gama de productos nuevos para las islas, fomentando el cultivo local y colaborando con agricultores canarios y en el que se han invertido 2 millones de euros y se han generado 14 nuevos empleos. Y, por otro, el proyecto más ambicioso en Murcia: la creación de un semillero propio de 15.000 m2 que tiene como objetivo el cultivo de plantas para sus cultivos de Murcia, Alicante y Albacete, pero que sobre todo se va a dedicar a la investigación de nuevas materias primas que, en el futuro, puedan formar parte de la dieta de los españoles, como por ejemplo los micro brotes. Para hacerlo realidad se ha destinado 1 millón de € y generado 12 nuevos puestos de trabajo.